Résumé
En esta opinión el autor trata la modernidad filosófica y cultural, en que ambas son productos de una temporalidad espacial; y como con la posmodernidad se ha declarado la muerte de la filosofía. Hace una reflexión acerca de que la filosofía no es una y que se constituye de filosofías, al respecto se pregunta ¿si existe una filosofía mexicana, en consecuencia, también una latinoamericana? Por ello brinda argumentos para poder responder a esta interrogante.